Al igual que en otros edificios de Arequipa, el material para su construcción procede de las canteras del volcán Misti. Las propiedades físicas de esta roca volcánica la convierten en una piedra muy fácil de labrar pero dificultan la talla en profundidad por su textura porosa. Esto dio lugar al desarrollo de un tipo de decoración superficial que, como en el caso de la iglesia de la Compañía, traspasa los límites de la portada y cubre parcialmente el resto del paramento formando un gran tapiz en piedra.