Ubicado a 2000 msnm, rodeado de los cardones milenarios, lo agreste y pintoresco del solitario paisaje, aparece misterioso y solemne al paso del tiempo la obra de un hombre tan particular como ermita?o, que se llamo Dionisio Aizcorbe y que con sus propias manos y durante treinta a?os fue construyendo en su mente su propio castillo, intentando reflejar para las siguientes generaciones su filosof?a de vida y pensamiento, obra que hoy conocemos como "El Castillo de Dionisio".