La primera mención conocida de este complejo proviene de Antonio de la Calancha, quien en su Crónica Moralizada (1638) lo describe como residencia del Inca y templo de los pescadores, así como, explica la denominación del complejo arqueológico, narrando la historia de Matheus Salade. Mucho después, un documento de 1774 registró que era llamado ?Huacas Chacra Ríos?, por la hacienda en la que se encontraba y que era propiedad de la familia Ríos. Mas tarde, el viajero Thomas J. Hutchinson (1873) visitó y publicó descripciones generales de las pirámides del complejo. Julio C. Tello visitó el lugar en 1935, 1936 y 1941, e hizo los primeros planos y estudios científicos. El ?padre de la arqueología peruana? también defendió tenazmente al complejo de la depredación de las compañías ladrilleras, quienes habían comenzado a demoler las pirámides para reutilizar la tierra de sus muros. Felizmente los ladrilleros se retiraron, aunque el complejo continuó bajo amenaza, esta vez por el desordenado crecimiento urbano de Lima, que terminó dividiendo al complejo en tres sectores separados.